¿Somos un país rockero después de IRON MAIDEN?

 

 

Una década se cumple y los hechos se vuelven recuerdos gloriosos ante la inmensidad de los eventos. Iron Maiden ofrecía el primer concierto de su historia en tierra colombiana el 28 de febrero del 2008, algo que muchos declararon esperar "toda su vida", así estuvieran viejos o hubiesen nacido quince años anteriores a dicha fecha, o menos. Como todo acto de historia, las anécdotas renacen después de ello anualmente evocando efectivamente los detalles que hicieron única aquella noche de la 'Doncella' sobre el Parque Simón Bolívar en Bogotá. El tiempo pasó y otros acontecimientos valiosos también se han impreso sobre las mentes y la ola inclemente de smartphones que en el presente adornan a la gente durante los conciertos. La iniciativa de las multinacionales y sus emprendimientos al fin después de tanto tiempo han ayudado a ubicar al país como un sitio de peregrinaje casi obligado cuando las agrupaciones de rock consideran viable presentar un recital que sustente la inversión de su gira. ¿Es totalmente cierto darle crédito a esta última frase? Paradójicamente Colombia, país que volvió a ver a Guns N' Roses hace menos de dos años, vio finalmente a The Rolling Stones (inolvidable el episodio de la oblea) y por poco repite visita de Paul MacCartney, no es todavía una plaza apoteósica para el hijo inconforme del blues. Vuelven las preguntas que hacen célebres los foros de los canales virtuales en la comunicación contemporánea (pero que no se resuelven): ¿Por qué nuestros conciertos no logran un aforo impresionante respecto a otros rincones del mundo? ¿Qué se requiere para que un buen conjunto de agrupaciones, líderes actuales en los estadios de cada continente pisen también suelo patrio? (aquellas que aún no lo hacen). ¿Las locaciones y el público de aquí funcionan solamente con leyendas vivas? En un contexto más amplio, ¿estamos preparados para afrontar el rock como una auténtica cultura o como una expresión de moda calcada por la huella de otros? Siempre sus opiniones son y serán bienvenidas.

 

 

Los invitamos a releer aquí nuestra nota elaborada hace un año sobre el primer concierto de Iron Maiden

 

 

Joel Cruz

@johellcrvx