Un atardecer imponente anunciaba el fin de la espera, el momento del Bogotá Gothic Fest 2017 había llegado y, con éste, el regreso triunfal de Sirenia a Colombia. Fueron 7 largos años desde la última vez; en aquella ocasión promocionaban The 13th Floor, su cuarto álbum en estudio. Ahora era el turno de presentar nuevo material, pero sobretodo una actitud renovada.

Los encargados de abrir la velada fueron los bogotanos de Rhyme of Tears; es cierto que el recinto apenas se estaba llenando, pero ese no fue impedimento para que lograran emocionar a los presentes con un sonido certero. Seguiría otra banda llamada Eternal Lament, los también capitalinos descrestaron con un potente melodic dark metal, demostrando que Colombia tiene talento de sobra.

El último acto antes del evento principal estuvo a cargo de Gaias Pendulum. Esta banda oriunda de Medellín y que tiene más de 20 años de carrera artística, saltó al escenario con una energía alucinante, energía que sumada a su música potente y desagarradora, consiguió reflejar lo más oscuro de su ser. Cabe destacar el emotivo tributo que estas agrupaciones le hicieron a Kraken y, en especial, a su vocalista Elkin Ramírez con las canciones Vestido de Cristal y Lenguaje de mi Piel, respectivamente.

El reloj marcaba las 9pm; de pronto empieza a sonar un intro majestuoso causando la euforia de los asistentes y confirmando lo que todos querían, Sirenia estaba lista para iniciar su espectáculo. Ya con los músicos en tarima hubo un detalle curioso, no había bajista en vivo. No obstante, el líder Morten Veland, su guitarrista Jan Erik Soltvedt, el baterista chileno Jonathan Pérez y la nueva vocalista Emmanuelle Zoldan, iban a dar lo mejor de sí para que esa noche fuera inolvidable.

Todo comenzó con Serpent, un tema idóneo para entrar en calor y compenetrarse con la filosofía del grupo. Más adelante, Emmanuelle demostraría en Lost in Life que está totalmente acoplada a sus compañeros y que tiene la voz adecuada para suplir a sus antecesoras. Continuaron con dos canciones de su nuevo álbum lanzado a finales del año pasado, la homónima Dim Days of Dolor y Goddess of the Sea, rematando con Cold Caress del 2013.

“Estamos mucho emocionado de estar aquí en Bogotá, muchas gracias por estar aquí con nosotros, los queremos mucho”, fueron las palabras que la cantante le dedicó a su público, quizá no en un español muy fluido, pero definitivamente si con las mejores intenciones. Luego, Veland desató el apasionamiento colectivo con Meridian, una composición que abrió el camino de su proyecto musical. The End of It All fue de las melodías más solicitadas, algo que los músicos retribuyeron con una gran interpretación de la misma.

El baterista Jonathan Pérez fue presentado con orgullo por su origen latinoamericano, acompañado de un fuerte aplauso. Las palpitaciones subieron al máximo con My Mind's Eye, una de las composiciones favoritas de los fanáticos. El concierto avanzó con otra canción del disco Nine Destinies and a Downfall de 2007, The Last Call. El final se acercaba de la mano con The Path to Decay, pero no fue sino hasta el gran cover de Tristania: My Lost Lenore, que el show llegó a su fin.

Sirenia reiteró con este magnifico recital porque es una de las bandas de metal gótico/sinfónico más importantes en el mundo. Quienes estuvieron presentes, pudieron asistir a una presentación intima, con un contacto total y una calidad sonora impecable. Seguramente regresarán, porque Colombia es un país que los hace sentir como en casa. El equipo de Hummingbird Press le agradece al Auditorio Lumiere por hacer esto posible y reitera su apoyo para futuros eventos.

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Autor: Juan Felipe “Rose” Moncayo
Twitter: @JF_RoseMoncayo